Martes 3 de febrero, 2004. San José, Costa Rica.



 

Los patriotas de Nueva Inglaterra se quedaron con el Superbowl que resultó inolvidable. AFP

Escándalo, fiesta y más

El Súperbowl no solo será recordado por el gol de campo en los segundos finales

Houston EFE- La 38 edición del Súper Bowl, la fiesta nacional no oficial en Estados Unidos, llegó a su final.

Los Patriotas de Nueva Inglaterra se quedaron con la victoria 32-29 ante las Panteras de Carolina en el “Reliant Stadium” de Houston ante 71.525 espectadores.

Atrás quedó una semana llena de contrastes, grandiosas y costosas fiestas privadas, derroche de todo tipo de consumismo, ninguna protesta pública, una burla al sistema de seguridad y la gran polémica surgida con el destape “involuntario” del pecho derecho de la cantante Janet Jackson.

El final deportivo, victoria dramática de los Patriotas por 32-29, ayudó para que la celebración del Super Bowl, el segundo que se disputa en Houston, haya sido todo un éxitopara la (NFL y la cadena de televisión CBS).

Los organizadores, que se habían propuesto como objetivo conseguir unos ingresos de más de $300 millones (¢126.300 millones ) para la economía de Houston con la llegada de 100.000 visitantes y ofrecer al país y al resto del mundo la nueva imagen de lo que es la cuarta ciudad más grande de la nación, dijeron haberlos conseguido.

El escenario del partido, el “Reliant Stadium”, un campo que costó a la ciudad $450 millones,(¢189.450) impresionó por la belleza de su arquitectura, incluido su techo retractable.

A pesar de la estricta seguridad, es te aficionado ingresó al campo ante la sorpresa de todos los espectadores. AFP
Fiesta y Janet

La semana, como siempre sucede con la celebración del Super Bowl, comenzó con la participación de los jugadores en obras benéficas de construcción de casas para personas sin recursos, visita a hospitales infantiles y de veteranos de guerra durante la jornada del día.

Pero la noche cambiaba por completo la actividad y fueron las fiestas privadas las que acaparaban la atención, a las cuales sólo podían tener acceso los famosos, políticos, empresarios o los que pudiesen pagar como minino $1.000 (¢421 mil) eso si con derecho a consumir lo que quisieran.

En contraste la NFL montó en el Centro de Convenciones George Brown todo lo que es en si el deporte del fútbol americano profesional para que los niños, jóvenes y adultos que deseasen participar en la llamada “Experiencia de la NFL”,

Para estas actividades el precio de las entrada fue más popular y se quedó entre los $10 (¢4210) y $25(¢10.525) , dependiendo de la edad y del paquete de entradas que se comprase.

Mientras los vendedores de mercancías, algunas falsificadas como comunicó la NFL, intentaban ganar el máximo de dinero con unos precios desde $10 (4210) para unos simples logotipos de plástico oficiales del partido hasta los $95 (¢40 mil , que costaron las chaquetas de las leyendas del deporte.

La ciudad también se tuvo que gastar $2 millones (842 mil millones) extras para desarrollar todo el dispositivo de seguridad en el que intervinieron los 5.400 agentes de policía que hay en Houston, el departamento de bomberos y otras 25 agencias, estatales y federales.

Pero ante tanta seguridad, incluidos 90 detectores de metales que pusieron en las entradas al campo, un aficionado consiguió entrar al terreno de juego al comienzo del tercer cuarto para exhibirse desnudo fue bloqueado por el defensa Matt Chatham y luego detenido por la policía.

Antes del incidente del espectador se había vivido la gran polémica de la noche cuando en la actuación musical del intermedio, el cantante Justin Timberlake puso al descubierto el pecho derecho de la hermana de Michael Jackson para que millones de televidentes la viesen antes que la cadena CBS la censurase.

La CBS, a través de un comunicado oficial, se disculpó, asegurando que en los ensayos nada de lo que sucedió se había dado y Timberlake también dijo que todo había sido algo involuntario y que lamentaba haber podido ofender a alguien.

Sin embargo, MTV la compañía encargada de la producción del espectáculo y que pertenece también como CBS al consorcio Viacom, había anticipado que la participación de Jackson en el Super Bowl podría generar un récord de audiencia, algo que se conocerá en las próximas horas cuando salgan los primeros resultados

Pero no sólo fue el espectáculo musical el que generó la polémica del sexo, también los comerciales, que valieron $2,3 millones (¢1520 millones) por 30 segundos, utilizaron una gran dosis de sexo, violencia y de chistes demasiado pesados sin tener en cuenta que la trasmisión del partido se daba en la llamada “hora familiar”.

Por suerte en el campo surgió la patada histórica de Adam Vinatieri y la consagración del mariscal Tom Brady como el nuevo Joe Montana de la NFL para que al final el deporte recobrase todo su grandeza y protagonismo con los jugadores siendo el verdadero centro de atención.

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